La menta con chocolate es una combinación con seguidores apasionados; es refrescante y delicada, pero con una personalidad muy particular.
Procedimiento
Merengue de menta
Batir las claras hasta que estén espumosas. Agregar el azúcar gradualmente y continuar batiendo hasta que se formen picos firmes. Incorporar, con movimientos envolventes, el azúcar glass y el licor de menta.
Introducir dos terceras partes del merengue de menta en la manga con la duya de punta gruesa y formar sobre una charola 2 discos de 20 cm de diámetro.
Formar gotas o chispas sobre otra charola con la duya de punta delgada y el resto del merengue y espolvorearlas con las hojuelas de chocolate.
Hornear los merengues a 120 °C durante 2 horas o hasta que estén secos.
Mousse intensa de chocolate
Fundir el chocolate y dejarlo entibiar.
Batir las yemas con la mitad del azúcar glass y el extracto de vainilla hasta que estén pálidas y hayan aumentado su volumen.
Batir las claras hasta que estén espumosas y agregar el resto del azúcar; continuar batiendo hasta que se formen picos firmes.
Mezclar, con movimientos envolventes, el chocolate con las yemas y añadir una tercera parte de las claras batidas. Incorporar el resto de las claras de la misma forma.
Refrigerar la mousse durante 2 horas o hasta que esté firme.
Montaje
Colocar encima de 1 disco de merengue la mitad de la mousse intensa de chocolate; poner encima el otro disco y el resto de la mousse. Decorar con las chispas de merengue.
Información adicional
Consejo
Puedes barnizar los discos de merengue de menta con chocolate oscuro fundido para evitar que se humedezcan al momento de colocar la mousse de chocolate.
Una vez montado, la textura crocante del postre sólo se conserva por algunas horas. Si deseas prepararlo con anticipación, es mejor preparar los discos hasta con una semana de anticipación y conservarlos en un recipiente hermético; en el caso de la mousse, la puedes preparar hasta con tres días de anticipación y conservarla en refrigeración.