La delicada y espumosa textura de la blanca guanábana mexicana se regocija con el color oscuro del tamarindo de la India. Ambas frutas tienen un delicioso sabor acidito.
Procedimiento
Esponja de guanábana
Hidratar la grenetina, dejarla reposar y fundirla.
Batir la pulpa de guanábana con el agua y el azúcar.
Incorporar la grenetina fundida y continuar batiendo hasta obtener una preparación firme y muy esponjosa.
Rellenar las copas con la preparación de guanábana o colocar con una cuchara sopera porciones sobre las charolas. Refrigerar las esponjas hasta que cuajen.
Reducción de tamarindo y chile piquín
Hervir la pulpa de tamarindo con el agua y el azúcar hasta que la mezcla espese. Incorporar el chile piquín en polvo.
Decoración
Poner sobre las esponjas de guanábana un poco de la reducción de tamarindo y espolvorear con el chile piquín. Decorar con las lagrimitas de colores y las pepitorias troceadas.
Información adicional
Consejo
Para obtener una pulpa de guanábana más tersa, licúala con un poco de leche o agua y pásala por un colador fino.
Hierve los tamarindos para desprenderles las semillas fácilmente.