Siempre la margarita de limón o margarita clásica con un ligero tono verde, se ha acostumbrado en México. A través del tiempo se han añadido otras frutas al preparado para darle un color y sabor diferentes: las margaritas rojas pueden ser de fresa o tuna roja; las verdes, de limón o hierbabuena, y las blancas, con crema de coco.
Procedimiento
Vierta azúcar en un plato hasta formar una capa de 5 milímetros de grosor. Frote todo el borde de 3 copas con el ½ limón.
Coloque 1 copa boca abajo sobre el plato y, sin soltarla, dele una vuelta completa sobre el azúcar de modo que el borde quede “escarchado”. Repita lo mismo con las dos copas restantes.
Licue de forma individual el hielo de cada margarita con los demás ingredientes. Sirva de inmediato cada margarita en una copa y decore con las rodajas de limón.