Rendimiento:
14 conchas
Preparación:
00:45:00
Cocción:
00:40:00
Reposo:
02:00:00
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Forme con la harina un círculo sobre una superficie plana y añada dentro, en una de las orillas, la leche con la levadura, y del lado opuesto, el huevo, las yemas y la sal. Disuelva la levadura en la leche, y mezcle el huevo y las yemas con la sal.
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Comience a integrar paulatinamente todos los ingredientes con ayuda de una espátula, hasta que la masa comience a despegarse de la mesa y tenga una consistencia suave.
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Agregue ⅓ de taza de mantequilla y amase hasta integrarla; añada el azúcar y amase nuevamente hasta que se incorpore también. Debe obtener una masa con una consistencia y textura lisa y suave.
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Engrase con la mantequilla restante un recipiente. Forme una bola con la masa, colóquela dentro del recipiente, tápelo con plástico autoadherible y déjela reposar en un lugar tibio durante 1½ horas o hasta que duplique su volumen.
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Divida la masa en esferas de 5 centímetros aproximadamente y gire cada una con la mano sobre una superficie plana, mientras ejerce una ligera presión sobre ellas, hasta que queden lisas y uniformes en toda su superficie. (A este proceso se le llama “bolear”.)
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Engrase una charola con la manteca y acomode encima las esferas de masa con una separación de 5 centímetros entre cada una. Unte un poco de manteca en sus manos y aplaste ligeramente las esferas de masa.
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Forme discos planos con la cobertura para conchas, no más grandes que las porciones de masa de la charola. Colóquelos encima de las porciones de masa, presionándolos ligeramente para que se adhieran.
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Enharine un marcador metálico para conchas. Marque con este utensilio rápida y firmemente la superficie de cada concha. Deje reposar las conchas en un lugar tibio hasta que dupliquen su volumen.
- Precaliente el horno a 180 ºC. Hornee las conchas entre 30 y 40 minutos o hasta que se doren y estén cocidas.
Forme con la harina un círculo sobre una superficie plana y añada dentro, en una de las orillas, la leche con la levadura, y del lado opuesto, el huevo, las yemas y la sal. Disuelva la levadura en la leche, y mezcle el huevo y las yemas con la sal.
Comience a integrar paulatinamente todos los ingredientes con ayuda de una espátula, hasta que la masa comience a despegarse de la mesa y tenga una consistencia suave.
Agregue ⅓ de taza de mantequilla y amase hasta integrarla; añada el azúcar y amase nuevamente hasta que se incorpore también. Debe obtener una masa con una consistencia y textura lisa y suave.
Engrase con la mantequilla restante un recipiente. Forme una bola con la masa, colóquela dentro del recipiente, tápelo con plástico autoadherible y déjela reposar en un lugar tibio durante 1½ horas o hasta que duplique su volumen.
Divida la masa en esferas de 5 centímetros aproximadamente y gire cada una con la mano sobre una superficie plana, mientras ejerce una ligera presión sobre ellas, hasta que queden lisas y uniformes en toda su superficie. (A este proceso se le llama “bolear”.)
Engrase una charola con la manteca y acomode encima las esferas de masa con una separación de 5 centímetros entre cada una. Unte un poco de manteca en sus manos y aplaste ligeramente las esferas de masa.
Forme discos planos con la cobertura para conchas, no más grandes que las porciones de masa de la charola. Colóquelos encima de las porciones de masa, presionándolos ligeramente para que se adhieran.
Enharine un marcador metálico para conchas. Marque con este utensilio rápida y firmemente la superficie de cada concha. Deje reposar las conchas en un lugar tibio hasta que dupliquen su volumen.
Información adicional
Nota
Este tipo de masa, llamada masa de bizcocho, se utiliza para elaborar diversos panes como las conchas, chilindrinas, pechugas, rollos de bizcocho, borrachos, chorreadas, mordidas, ojos, picones, soletas, entre otros.
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